Autocuidado, higiene y vacunación: claves para combatir la Hepatitis A en el Valle de Aburrá

Entre enero y mayo de 2024, solo Medellín ha reportado 542 casos de Hepatitis A, un aumento del 266 %, en comparación con el mismo período del año anterior, cuando se registraron 179 casos. Antioquia, por su parte, ha experimentado un aumento del 246 % con 684 casos reportados en el mismo lapso.

Ante esta situación, el Área Metropolitana del Valle de Aburrá, a través de su equipo de Salud Pública, lideró el primer Consejo Metropolitano de Salud que reunió a diversas autoridades e instituciones públicas con el objetivo de articular acciones a corto, mediano y largo plazo para prevenir la propagación de esta enfermedad infecciosa, cuyos principales vectores de contagio son las deficientes condiciones sanitarias y el consumo de alimentos contaminados por heces.

Los síntomas de la Hepatitis A son variados y pueden incluir fiebre, malestar general, vómitos, náuseas, dolor abdominal, así como la coloración amarilla de la piel y los ojos.

En el Consejo Metropolitano, se hizo énfasis en la necesidad de actualizar el censo de población en riesgo de contagio del Valle de Aburrá y la implementación de campañas de difusión conjuntas que promuevan medidas preventivas. Además, se puso en consideración la adquisición de vacunas para la población mayor de doce años como parte integral de la estrategia.

Santiago Pérez Valencia, subdirector de Desarrollo Social del Área Metropolitana señaló, “esta articulación busca generar consciencia y acciones concretas para prevenir brotes epidemiológicos. Es fundamental difundir medidas de autocuidado, como el lavado de manos frecuente, la desinfección de alimentos y el uso adecuado de los servicios de salud”.

Datos de las autoridades de salud indican que el 33 % de los casos reportados en Medellín en 2024 han requerido hospitalización, en otros municipios del Área Metropolitana también se han registrad, siendo Bello, Itagüí, Sabaneta y Copacabana los más afectados.

La prevención de la Hepatitis A es una tarea en la que es fundamental la articulación entre las autoridades de salud pública de los municipios del Valle de Aburrá y el Distrito, y por supuesto, del compromiso colectivo frente al autocuidado, la higiene y la vacunación.